martes, 12 de marzo de 2024

Agitar antes de usar

 

Te abrazaré mañana

aunque la luna no salga

y te besaré de tal manera que

 mis palabras se convertirán

en un manicomio de versos arrasados

por la belleza de tu nombre  

Los pájaros y los abrazos


Yo conocía a José Luis Esteban como actor, lo había visto interpretar algunos personajes, pero no sabía que era poeta. Y tampoco había pensado nunca que poemario suena a “armario empotrado de ilusiones muertas” hasta que leí sus versos. 

Palabras que no he gastado (Olifante, 2023) es una selección de vida, belleza y pensamiento, y también ironía que mastica el dolor. Una  mezcla aparentemente imposible que en su pluma resulta tan inteligente como emotiva donde las “palabras juegan y esperan a ser leídas”.

Hace dos meses conocí personalmente a José Luis en un evento abordándole para que me firmase un ejemplar de su libro, que llevaba en mi bolso, del que le dije que tenía buenas referencias pero no había leído. Pudo pensar que yo estaba un poco pirada. Pero es hombre generoso y comenzamos a charlar de cine, de teatro, de letras y de la vida. En esa conversación, tan fugaz como agradable, le anuncié que tal vez escribiría una reseña del libro de poemas (ya jamás utilizaré la palabra poemario para definir versos negro sobre blanco) pero le confesé que suelo escribir solo de aquello que de alguna manera me enamora, sea cine o teatro o literatura o poesía o música; reconozco que no soy una crítica demasiado crítica, para que esforzarnos en proyectar lo que no nos ha emocionado. En definitiva, que en mi blog las reseñas de libros y cine suelen ser siempre favorables, aun cuando en ellas también se reconozcan aspectos menos positivos. Prefiero resaltar lo que vale la pena mejor que catapultar lo que no, que por sí mismo ya se irá desvaneciendo.

Pues bien, afirmo que Palabras que no he gastado es un libro de poemas imprescindible, un sondeo de la existencia, poesía en estado puro. Tan profundo como divertido. Sí, sí, divertido. La poesía no tiene porqué ser aburrida. El autor nos conduce con sus reflexiones por espacios del pensamiento donde las palabras se acoplan en amalgamas inimaginables. Cita personajes y escribe palabras que aparentemente nada tienen que ver con la poesía y cuya presencia sitúa al lector en ese imaginario de la Generación Beat donde la libertad acepta cualquier combinación por dispar que parezca. Así, el realismo contemporáneo y el desencanto existencial se enriquecen de un vitalismo formal que provoca el arrebato de palabras y versos imposibles de imaginar si no se ha leído y se ha vivido con pasión. 

Referencias a Kerouac, Leopoldo M. Panero o Miguel Labordeta. También cine, actores en blanco y negro, Víctor Mature, Charlton Heston, Gregory Peck, Tyrone Power. Y televisión, Jordi Hurtado, los telediarios o Curro Jiménez. Hasta el Papa Pío XII. Historia, Geografía, Filosofía, el mundo, New York, París, Tokio. Todo en esas Palabras que no he gastado. Y el niño que fuimos y el hombre que somos. Y el presente del Metaverso e Instagram. Y Algo más: "O las palabras son fecundas, / o son estériles los versos"

Y la familia, a la que amamos o añoramos. 

Ah, claro, y el amor.

Todo eso está en versos de rima libre, con cadencia y musicalidad elegante, sobria, a veces en prosa poética. Sin demasiadas florituras ni metáforas pero con virtuosismo ingenioso. Y mucho se aprende leyéndolos. De la mano de ese maestro que llena las aulas por que hace las clases divertidas mientras realiza un "pedido de besos a Glovo”. “Pobre literatura convertida en comentario de texto”. Y sin embargo, todo es serio y riguroso. Y bello. “Es la belleza. / No la toques más. /Déjala que se encuentre con la rosa /y que juntas escriban un poema / mucho mejor que este

Me encontré con José Luis el otro día, justo la mañana en que había leído dos de sus poemas. Y le dije: “Me parecen extraordinarios”. Ahora que ya he finalizado el libro, desde mi humilde parcela, recomiendo que se lea y se vuelva a leer. Es una explosión de sabiduría y belleza. Si llevase un prospecto para su uso pondría "agitar antes de usar", y el alma queda sanada sin efectos secundarios al instante.  Palabras que no he gastado, un libro que hay que tener muy cerca. Y pensar. Y vivir.

Esperare que no haya luces

para que la oscuridad

sea mas visible.

No saber nada

y esperarlo todo.

Vendrá el futuro y no estaré

por eso quiero levar anclas

navegar hondo y ligero

y llegar a puerto antes que él

    El último momento

lunes, 11 de marzo de 2024

De vanidades y la alegrías

Permitidme un poco de vanidad. Este año, con motivo de la conmemoración del Día Internacional de los Escritores, entro en el club  y no puedo estar más contenta. Como escribí en mi muro de Facebook, entro humilde, casi me siento una intrusa, pero llego con energía e ilusión. En el video del informativo de Aragón Televisión comparto espacio virtual con el escritor Sergio Del Molino, al que leo, sigo y admiro. Yo la escritora novel, abrumada. 



También estuve en el programa de Aragón Radio La Torre de Babel, con Ana Segura,  y los medios locales y comarcales se hacen eco en cada una de las presentaciones que voy. No voy a poner aquí todos los vídeos y audios y páginas de periódicos pero estoy muy feliz por las alegrías que Cuestairse (Los libros del gato negro, 2023) me regala día a día. Así que permitidme la vanidad y compartir mi alegría con todos vosotros.


Y he celebrado este año el día Internacional de la Mujer Trabajadora también con mi libro. Fue en Fraga y estuve acompañada por Paula Beltrán. 



Gracias a lectoras y lectores que me hacen llegar sus impresiones, hasta ahora todas positivas. Gracias a las bibliotecas y bibliotecarias, ayuntamientos y concejalías de cultura que me acompañan en las presentaciones de Cuestairse en todos los rincones a los que va llegando. No puedo más que sentirme feliz y agradecida


Próximamente (sine die) abriré una serie de entradas en este blog en las que iré publicando impresiones del viaje de Cuestairse y volaremos al Hemisferio Sur, de la realidad a la ficción, a Uruguay y Argentina. 









viernes, 19 de enero de 2024

Cuarentena, cine y versos

“En esta familia no paramos”, escribí anunciando que el jueves teníamos una cita con Ignacio Lasierra en la Filmoteca de Zaragoza. Y añadí esta observación: “no presenta película, sino libro. De poemas. Y es que el cine, las palabras, la imagen o el texto componen el arte para comunicar emociones”.

Y así fue. Batería de palabras. "Día, noche. Lluvia, paraguas". Asociamos palabras e imágenes sin tiempo a pensar el motivo que nos lleva a ello. Ahora nieva. Siempre asociaré la lectura de Cuarentena, el libro de poemas, acompañada de estos copos ingrávidos que blanquean la calle y la luz. Como quien recuerda las películas que vio en el lugar dónde las vio, mente privilegiada.

No puedo ser objetiva, ni pretendo serlo, a la hora de escribir estas líneas. El poeta es mi hijo. ¡Qué orgullosa se siente una! Se me llenan las letras y el alma de orgullo al escribirlo. Las palabras que él escribe, en cierto modo, nacen de mi vientre también. Por eso, éstas no construyen una reseña o crítica tampoco. 

Solo quiero agradecer a la vida el lujo que me brinda al poder leer estos poemas. Y saborear los versos rimados o anárquicos de la noche, del amor, de las sombras y los sueños viajando por el desierto en un Seat Ibiza que no es otra cosa que un traje de astronauta que el poeta no recuerda donde ha dejado. No entenderán esta frase quienes no estuvieron ayer en la presentación de Cuarentena. Un acto entrañable, simpático, de la mano del editor, Manuel Baile y José Antonio Aguilar, Director del Festival de Cine de Fuentes de Ebro. 

Manuel Baile, Ignacio Lasierra y José Antonio Aguilar

Por cierto, hablando de asociación de palabras y de ideas. Observaréis que en ningún momento, excepto en el título de este post, he escrito "poemario". Y es que desde que me enteré, tal como defiende José Luis Esteban en Palabras que no he gastado (Olifante,2023), que poemario suena a "armario empotrado de ilusiones muertas", algo añejo y viejuno, no he vuelto a usar esa palabra. Mejor libro de poemas. Y fue precisamente José Luis Esteban, actor, escritor y poeta, quien puso el broche de oro a la presentación declamando algunos versos que con su voz y su espíritu tomaron vida propia. 

Esa Cuarentena que habla de tierra baldía, poemas desgarrando la soledad y el silencio, campos labrados de familia, lugares, deseos y recuerdos. El título, explica el autor, estaba ya pensado antes de que ocurriese la cuarentena que todos sufrimos en la pandemia del 2020. Juan Luis Saldaña, coordinador de la colección Pasat_Temp en la que se incluye este libro de poemas, animó a Ignacio a mantener el título. El libro se compone de cuarenta poemas, "cuarenta y uno" aclara Lasierra, enmarcados en cuatro bloques: Destierro, Aislamiento, Purga y Renacimiento. El cine, omnipresente, como luz y como espacio, en el pueblo y en la ciudad, con Charles Chaplin y su bombín sonriendo cuando las palabras regresan al pasado para identificar relojes y festivales de besos. Películas proyectadas con finales y viajes soñados. De viajes y sueños será mi próxima entrada en este blog, desde Cuestairse. Pero hoy no toca hablar de mi libro.

José Luis Esteban, de pie, leyendo algunos versos de Cuarentena

Y no escribo más. No soy objetiva, lo he dicho. Ahora estoy embriagada por la lectura y por la nieve que no deja de caer. La ciudad ya es blanca.

Cuarentena (Editorial Comuniter) os espera. Leed los versos y luego ya me decís si puedo ser objetiva. La vida trae hoy la nieve y mañana el sol. Y siempre el deseo de vida para compartir emociones o palabras asociadas. 

Quien no desea ya vive muerto
aunque su vida transcurra en calma.
El deseo es ser y ser humano es
el huracán que mueve el alma.

Ignacio Lasierra, extracto del poema XXII



lunes, 15 de enero de 2024

De árboles y corchos

Solemos compartir las penas para que el dolor no nos pese tanto y sea mas llevadero. Y cargamos con lo nuestro y lo que les ocurre a quienes nos rodean. Pero debemos también compartir nuestras alegrías para compensar la balanza y hacer partícipes a todos de nuestros momentos de felicidad. Por eso insisto con una foto de mi árbol de jade florecido, cada día mas, en este invierno donde ya alargan los días.

Hoy hemos encontrado el corcho misteriosamente desaparecido del cava del día de Nochebuena; estaba en ese otro árbol que año tras año bajamos del granero y adornamos para celebrar la Navidad. ¿Será también un signo de buenos augurios? Durante todo el mes de enero nos felicitamos el año y este 2024 viene cargado de sorpresas, como este corcho o las nuevas flores que cada día van creciendo en mi árbol de jade. Hoy va de árboles, alegría, felicidad y compartir la vida. La semana que viene volveré a hablar de #Cuestairse, ese libro que tanta alegría y felicidad me está reportando. Gracias. ¡A ser felices!






domingo, 14 de enero de 2024

Seguimos

Fb. 8 de enero. (Publico aquí con seis días de retraso). Lunes después de las fiestas navideñas. Día de regreso al cole y al trabajo, de rebajas anunciadas, de comenzar a quitar las luces de las calles y retirar el árbol de casa, guardar los adornos navideños para el año que viene e intentar que todo vuelva a la normalidad. Se reafirman los propósitos del nuevo año, bajar peso, hacer ejercicio, leer ese libro. A propósito de esto último, os anuncio las próximas citas para este mes de enero en que hablaré y firmaré Cuestairse, ya sabéis, esa novela que tantas alegrías me está regalando. Después de haber pasado ya por Zaragoza, Monzón, Huesca y Candasnos, Cuestairse estará este sábado 13 de enero en La Almolda, en su biblioteca, de la mano de #EmiliaCastillo, la responsable y animadora a la lectura en esa localidad monegrina cerca de mi casa. La segunda, el día 24, al otro lado del Atlántico, donde comienza y acaba la historia de #Cuestairse, La Paloma, Uruguay, también en su biblioteca junto a la playa de La Balconada y el lugar que da título al libro, de la mano de Inés Laporta , productora audiovisual que me acompañará junto a mi familia en ese viaje. Os espero donde os quede más cerca

😂



viernes, 22 de diciembre de 2023

Alegría (contenida) y buenos augurios para compartir. Belleza.

Dicen que cuando el árbol de jade florece es signo de prosperidad y éxito. Le llaman el árbol de la buena suerte. Este año, por primera vez, el que tengo en casa, cada vez mas precioso y enorme, está reventón. Tiene decenas de pequeños capullos a punto de florecer. Imagino que es buen augurio para el próximo 2024, que será cuando las flores se abran en toda su plenitud. 

Quiero compartirlo en estas fotografías para que os llegue a todos y todas: abundancia y prosperidad, pero sobre todo paz, amor, serenidad, compasión y fraternidad



Y quiero también contagiaros de alegría, una epidemia beneficiosa, que me provoca el haber publicado mi primera novela #Cuestairse, agradeciendo la acogida que está teniendo. Ver la pila de libros en la mesa de novedades de las librerías es una felicidad indescriptible, que quiero compartir con los seguidores de este blog, donde tantas reseñas de otros libros he ido colgando. Ahora toca "hablar de mi libro".
 


A continuación inserto algunos enlaces de prensa que se han hecho eco de las presentaciones en Zaragoza y Huesca. (Mi modestia me silba al oído: Autobombo. Sí, pero creo que es apropiado que vayan quedando aquí recogidos)






DiariodelAltoaragón   https://www.diariodelaltoaragon.es/noticias/cultura/2023/12/12/aurora-pinto-el-acoso-laboral-es-un-tema-muy-poco-tratado-en-la-ficcion-literaria-1696879-daa.html


Diario de Huesca

Y el mapa de librerías en toda España donde podéis adquirir Cuestairse según Todostuslibros.com. También está disponible en Fnac, Casa del libro y Prames Librería online.


Próximamente anunciaré nuevos encuentros con lectores y lectoras, y firmas del libro, unas cerca y otras muy lejos. La más inminente el día 30, en casa, en el pueblo donde vivo desde hace cuarenta años, el pueblo de mi madre y su familia, el pueblo de mi marido y su familia, el pueblo de mis hijos, es decir, mi pueblo, Candasnos. Sabéis que nací y crecí en Barcelona, amo mi tierra catalana y el Mediterráneo, pero también amo la tierra seca y el aire tosco monegrino que llena de palabras mi imaginación para seguir escribiendo. 


Hoy es 22 de diciembre. No me ha tocado la lotería nacional, para variar. Veo en el informativo la alegría de los afortunados, sus descorches de botellas de champán, sus saltos de euforia jubilosa, cómo se abrazan unos a otros. Yo siento lo mismo este año con Cuestairse. Mi dicha es más contenida, sí, pero igual de gozosa. Gracias. Gracias. Gracias. 

Por último, veréis que el "tronc de nadal" ha perdido su "barret". No importa. Ahora será la "tronca de nadal". ¿A que está guapa?

"El secreto de la vida es la belleza", escribe Manuel Vilas en su Alegría

Felices fiestas, viva la vida, las flores, la literatura y las troncas empoderadas.

           

domingo, 17 de diciembre de 2023

Pajaricas

Domingo 17 de diciembre de 2023. Día soleado y luminoso tras una noche bajo cero, la primera helada a cinco días de que comience el invierno.

Dedico la tarde a la lectura de un libro pequeño, coqueto, de título larguísimo —como reconoce el propio autor— y enorme contenido. No me gusta recurrir a los refranes, pero es inevitable hoy citar eso de “en frasco pequeño está el mejor perfume”. El secreto de las pajaritas. El homenaje de un carpintero a Ramón Acín en el santuario de San Úrbez de Nocito (Huesca). Admiración, respeto y dolor (cuento extra) es la última exquisita fragancia que nos regala un perfumista de las letras, Víctor Juan. Un maestro que escribe esa prosa amable, inteligente, luminosa, fuente de sabiduría y generosidad. Por qué con él aprendes tanto como te diviertes, reflexionas sobre conceptos abstractos como la justicia, el pensamiento, lo infinito y “mientras lees, te sientes acompañado y reconfortado” parafraseando al propio autor en el prólogo de esta “historia de valentía, de compromiso y de amistad”.

Después de leer el libro, de conocer e imaginar la historia del carpintero que colocó las pajaritas en el retablo del Santuario de San Úrbez, en Nocito (Huesca), después de acompañar la memoria de Ramón Acín y de escuchar el susurro de las dos pajaritas que han comenzado a dialogar ahora ya en el anochecido, no se me ha ocurrido mejor homenaje que hacer dos “pajaricas”, como las llamaba Ramón Acín, y colocarlas mirándose, para “que se cuiden la una a la otra y se cuenten secretos”. Y escucho que agradecen lo imaginado, las palabras compartidas, frases que son un poema de sabiduría, y agradecen la sonrisa que ven en los lectores, esa que siempre queda al finalizar los libros de Víctor Juan. Con él, los días son azules y las librerías se llenan de vida.


Gracias por este libro “híbrido, mestizo, que combina la investigación histórica con el ensayo y la ficción”, tal como él mismo define este exquisito perfume, que huele a vida y a alegría, porque para Víctor Juan “la tristeza no es la última palabra” y “necesitamos historias hermosas para vivir, historias balsámicas que alivien el dolor que nos producen los arañazos en el alma y en el corazón”.

Mañana, lunes, las "pajaricas" de papel se quedarán entre las páginas de ese libro a la espera de nuevos secretos y, sobre todo, para que las historias que escribimos sirvan también para restituir justicia a la Historia, y que el olvido no borre el recuerdo de hombres y mujeres a los que se les robó la vida y la alegría.

Editado por Rolde de Estudios Aragoneses y Fundación Ramón y Katia Acín

viernes, 8 de diciembre de 2023

Fiebre en la feria

La noche anterior no había dormido tan apenas. No por los nervios, como me preguntó alguien al día siguiente, sino porqué había estado con fiebre. Me tomé una aspirina efervescente en cuanto me levanté y decidí que la ocasión merecía el esfuerzo: mi primera Feria del Libro Aragonés como autora. Así que emprendí viaje bajo un cielo soleado rumbo a Monzón. Todo iba a ir bien.

Aunque las primeras horas mañaneras fueron un poco desoladoras. Poco público, pocas firmas. Comencé a preguntarme si valía la pena estar allí con escalofríos, disimulando mi malestar físico, con una sonrisa y una energía impostada. Pues mira, sí, valió la pena. Conocí a dos poetas, que además son padre e hijo, los Conde, con quien compartí stand editorial, y con los que daba gusto estar allí. También con un ilustrador, Carlos, de humor surrealista y generosidad inmensurable, que dibujó y coloreó mientras yo repetía mi admiración y mi envida sana, ¡Qué arte!.

Llegó la hora de comer y ahí me fui recomponiendo. El dolor de cabeza y los escalofríos dejaron paso a una tos insistente pero que podía tolerar. Lo mejor, la conversación con todos los de la gatera, los dos poetas, el ilustrador, la editora, Don Antonio y Sol.

Ya en la tarde el púbico se animó. Pude saludar a algunos amigos y firmé para ellos mi libro, #Cuestairse. Pocos pero muy entrañables.


Salí de allí con dos libros dedicados, autores que regalan literatura y amistad. Era noche cerrada cuando emprendí el camino de vuelta por esas carreteras inhóspitas de la provincia de Huesca, sin circulación ni luces ni tan apenas pueblos, casi fantasmales, con el firme salpicado de enormes charcos, curvas de circuito y pendientes estrechas. A ratos diluviaba. Volví a preguntarme si todo aquello valía la pena. Y volví a responderme que sí. La experiencia, nueva, enriquecedora. Por los nuevos amigos, por la literatura y por los libros.

martes, 14 de noviembre de 2023

Un domingo fantástico en martes

Que las niñas y los niños adquieran el hábito de la lectura depende, en gran medida, de los libros que llegan a sus pequeñas manos en los primeros años de vida. Hoy se ha presentado en Zaragoza un nuevo cuento infantil, un libro que está escrito desde la experiencia de una mujer que lee con sus hijos, todos los días, historias que enriquecen su mente y su alma. Por eso estoy segura de que este nuevo cuento, Un domingo fantástico, es un imprescindible en la biblioteca de vuestros nietos, sobrinos, hijos, ahijados, alumnos…todos los niños y niñas que conozcáis.

La historia que ha escrito Paula Beltrán comienza así: “En la parte más alta de la casa del abuelo había un lugar tan misterioso que permanecía oculto”. Imaginad que interesante es lo que viene a continuación. Y como estamos hablando de un libro infantil, tan importante como el texto son las ilustraciones. Pilar Serrano ha dibujado vida y color en cada una de las palabras, haciendo que las páginas sean un espacio donde las niñas y los niños puedan encontrar sorpresas e imaginar mucho más todavía. “Es un lujo estar con ella”, ha afirmado Paula, que al principio no se atrevía a proponerle a Pilar que ilustrase el cuento. “Desde que recibí el mensaje de Paula y comencé a leer la historia, ya iba viendo ideas”, ha asegurado Pilar, que se estrena en esto de ilustrar un cuento infantil.

Paula Beltrán y Pilar Serrano en la presentación 

Esta tarde de hoy martes 14 de noviembre se ha presentado en Zaragoza el libro. Pero no solo eso, sino también la editorial que la autora, Paula Beltrán, ha creado, Tacitaymedia. “El 18 de agosto, paseando por los montes de los Pirineos, me dije, ¿por qué no?”. Caminar por los montes con los pies en la tierra,  seguro que tomó la decisión correcta. Una nueva editorial es siempre motivo de felicitación y celebración para quienes amamos los libros. Enhorabuena, Paula.

En la sala del Gran Hotel de Zaragoza donde se estaba llevando a cabo la presentación había, además de emoción y nervios, muchos niños y niñas que al principio revoloteaban por allí pero se han sentado prestando atención en cuanto Paula ha comenzado a leer el cuento. Luego, con el chispún final todos han estallado en aplausos. Y después, en el turno de preguntas, han sido esas niñas y esos niños los más interesados en averiguar, por ejemplo, cuánto tiempo les ha costado a las autoras escribir e ilustrar Un domingo fantástico. “Comenzamos en febrero”, han respondido al unísono escritora e ilustradora. También les han preguntado si se atreverían a escribirlo en otro idioma, o por qué Luc, uno de los niños protagonistas que también lo era en el primer libro de Paula ¿Dónde meto a mi hermana? (Hola Monsruo,2021), lleva aquí el pelo de otro color. Incluso ha habido una niña que se ha ofrecido para enviarle un guion y ver si se lo publica en la nueva editorial.

Paula Beltrán leyendo Un domingo fantástico junto a Cristina Pemán, que ha presentado el acto y Pilar Serrano. Los niños y niñas con la mano levantada para hacer sus preguntas

Auguro éxitos para Un domingo fantástico y para la editorial y deseo que sean muchos más los cuentos y las historias que Paula y Pilar publiquen. Como ha dicho una de las niñas, a mi también me gusta que las nubes y los árboles de este cuento tengan ojos y cara. Y que haya muchas ratitas escondidas entre las páginas.




 

sábado, 11 de noviembre de 2023

Día de las librerías

Hoy es el #DíadelasLibrerías. Este año voy a celebrarlo de una manera muy especial pues ya se puede comprar en cualquier librería mi primera novela,  #Cuestairse. Aunque no aparezca en el escaparate (soy una escritora novel) o en las estanterías, podéis pedirla facilitando el título y la editorial, LOS LIBROS DEL GATO NEGRO, y el librero o la librera, si no tiene stock,  solicitará el libro a la distribuidora para que en un par de días podáis comenzar a leer. También se puede adquirir online, pero el encanto de ir a una librería y percibir ese aroma y ese calor de letras, papel, tinta, colores de las cubiertas, vida y cultura, es muy recomendable.

Ya he escrito en otras ocasiones sobre mi vínculo emocional con las librerías, más allá de ser un lugar donde comprar libros, pues yo crecí en la que mis padres tenían en Barcelona, #LibreríaAurora. Y, precisamente, el jueves, la primera pregunta de Antón Castro, quien tuvo la generosidad de acompañarme en la presentación de #Cuestairse, fue esa, qué significa para mí #LibreríaAurora. Librería Aurora fue mi casa, donde yo pasaba todas las horas, rodeada de libros, y me impregnaba del aroma del papel y la tinta. 
Es quizás el germen de mi pasión por la lectura y por la escritura. Es ahora un compendio de recuerdos, de referentes, de raíz de mi misma. Llevaba el nombre de mi madre que se llamaba también Aurora. 

La importancia del nombre: mi primera novela, #Cuestairse, que es el nombre de una casa, que se llama así...¿por qué? Para conocer la respuesta, mejor leer la novela, una historia de ficción que narra la realidad del acoso laboral, pero también idas y venidas a través del océano de tres generaciones en busca de libertad y vida. Y de lo que cuesta irse cuando amamos un lugar, un mar o unas personas. Una historia con un final sorprendente y esperanzador.

Vayan ustedes hoy a la librería a celebrar esta fiesta y cualquier día del año. Todos los días deberían ser el #DíadelasLibrerías. Además, en esta ocasión, pueden pedir esa novela de la que llevo hablando unos días, #Cuestairse. 

FELIZ #DÍADELASLIBRERÍAS.



Marina Heredia, editora de Los Libros del Gato Negro y Antón Castro, periodista y escritor, a mi derecha e izquierda, en el IACC Pablo Serrano el pasado jueves 9 de noviembre, presentando Cuestairse, mi primera novela,
Como escribí ayer en Facebook, después de la resaca emocional, gracias a todos por acompañarme. Espero que disfruten de la lectura de #Cuestairse y sigamos hablando de mi libro.

Nota: Me apropio las fotos que me han llegado de la presentación del jueves para compartirlas, con permiso de María Angulo Egea y Clara Fuertes Escritora.